Patrimonio que inspira al mundo

13:09 31 de janeiro de 2022 Por Daniel Oiticica

El Salvador no es solo un destino de inversión. También es un lugar de innumerables iconos turísticos, que combina playas, volcanes, herencia precolombina, pueblos coloniales, bosques tropicales y una exquisita gastronomía. Todo puede ser visitado en poco tiempo, ya que las distancias son cortas. Inversión más experiencias, solo en El Salvador

El patrimonio subacuático de origen volcánico es otra experiencia que ofrece El Salvador.

El país cuenta con más de 300 kilómetros de playas, con zonas ideales para el surf. También hay espacio para tirarse en la arena y disfrutar del sol y de la comida con productos del mar.

Algunos puntos costeros son propios de los bosques salados, donde los manglares son el hogar de una gran variedad de especies marinas, además de la ruta para diferentes aves de paso en su proceso migratorio.

El patrimonio subacuático de origen volcánico es otra experiencia que ofrece El Salvador, además del buceo arqueológico para conocer los barcos antiguos que surcaron las aguas salvadoreñas, en los siglos XIX y principios del XX, y que encallaron frente a las costas del país.

El Salvador también ofrece opciones de paisajes y climas en valles, así como las vistas panorámicas y climas templados desde las cadenas montañosas. Ahuachapán, Santa Ana, Chalatenango, Morazán y La Unión son los departamentos que se caracterizan por contar con las principales elevaciones térreas. Algunas de estas, al occidente del país, propician los cultivos de café en altura y, además, se han convertido en destino obligado para degustar de las bebidas que se derivan del llamado “grano de oro”.

Hotel Cerro Verde, la inspiración de Exupéry
Ubicado a una altura de 1.950 metros sobre el nivel del mar y a 30 sobre el cráter del volcán de Izalco, el Hotel Cerro Verde es un patrimonio de la historia de El Salvador, recuperado por el actual gobierno. El volcán de Izalco está relacionado con una de las obras más importantes de la literatura mundial, El Principito, del escritor francés Antoine de Saint-Exupéry, con más de 50 millones de copias vendidas en 120 idiomas.

Antoine de Saint-Exupéry estuvo casado con la artista salvadoreña Consuelo de Saint-Exupéry. Su nombre de soltera era Consuelo Suncín Sandoval Zeceña. Nació en Armenia (Sonsonate), en El Salvador. Desde su casa, Consuelo podía ver los volcanes de Santa Ana, Izalco y Cerro Verde. Consuelo y Antoine estuvieron varias veces en Armenia para visitar familiares. En El Principito, así como en el pueblo de Armenia, existen tres volcanes, dos en actividad y uno apagado, inspirados en los volcanes salvadoreños.

Ubicado a una altura de 1.950 metros sobre el nivel del mar y a 30 sobre el cráter del volcán de Izalco, el Hotel Cerro Verde es un patrimonio de la historia de El Salvador.

Construido en 1955, el hotel estuvo cerrado desde 2001 por los terremotos que le infligieron daños a las bases de la infraestructura. Con el Gobierno de Nayib Bukele se decidió revivir este ícono histórico nacional, conservando y respetando los elementos singulares del patrimonio cultural y arquitectónico de El Salvador. El gobierno como facilitador y el sector privado con su conocimiento y generación de empleo. Su recuperación marcó la reactivación de un espacio turístico, y generó empleo local, inversión, además de un empuje importante a la zona del hotel.

El inmueble cuenta con 4 salones, 20 habitaciones, área de cocina y servicios, áreas comunes con servicios sanitarios, estacionamiento interno para 30 vehículos, caseta de vigilancia, espacio para oficinas, entre otras instalaciones.

Su arquitectura es moderna, con elementos minimalistas y espacios amplios y libres. Destaca la conformación original de la forma del hotel combinando materiales de madera, vidrio y concreto. La madera se ha reutilizado en un 50% de la original de los años 50. Se han implementado criterios arquitectónicos como la integración, armonía, ritmo, color, calidez y forma.

Sus tres chimeneas representan los tres volcanes Izalco, Santa Ana y Cerro Verde, y en el inmueble se repite la tendencia de colocar siempre tres elementos con este simbolismo. El inmueble se ubica en armonía con el paisaje natural que representa el complejo de los volcanes de Santa Ana, Izalco y Cerro Verde, así como la cercanía del lago de Coatepeque el cual cuenta con una gran belleza escénica natural.