Cultura: Obligación, finalidad y derecho
Como derecho humano, la cultura es fundamental para el bienestar social, según lo entiende Mariemm Pleitez, ministra a cargo del área de cultura en El Salvador. Considera, además, que es obligación primordial del Estado crear las condiciones para su desarrollo. Por eso es que, junto al presidente Nayib Bukele, no solo apostó por la federalización de la agenda cultural a nivel interno, sino también profundizó toda clase de programas internacionales, como Iberescena, que entrega ayudas de hasta 20 mil euros para la coproducción de espectáculos de artes escénicas. Este incentivo a la cultura dio sus resultados: solo en el último año los diferentes espacios y espectáculos del Ministerio de Cultura han registrado alrededor de 250.000 asistencias en sus casi 200 espacios culturales a lo largo y ancho del país.
En medio de todo esto, ocurrió una pandemia, pero Pleitez supo hacerle frente. En atención a la salud mental de la población y tras los días del confinamiento, la Dirección Nacional de Casas de la Cultura y Parques Culturales llevó funciones de cine a 35 municipios y comunidades de todo el país. Como si eso no fuera suficiente, el Ministerio de Cultura subsidió distintas academias de formación en Artes, las cuales lograron mantenerse activas a través de clases y recursos virtuales. A su vez, creó Fondos de Emergencia al Sector Cultural que fortalecieron el área y entregaron bonos y paquetes alimentarios a cerca de 30 mil familias.
Así, El Salvador está haciendo desde 2019 una apuesta fuerte por todo el sector cultural. Impulsa múltiples procesos artísticos desarrollados por la propia sociedad salvadoreña, factor que se vio materializado en una inversión gubernamental cercana a los 58 millones de dólares.
¿Cuáles son los principales proyectos del área de Cultura para El Salvador?
El Ministerio de Cultura ha logrado descentralizar la agenda cultural, llevándola más allá de la capital, a través de las direcciones nacionales con las que contamos y en las que se incluyen los Teatros Nacionales, Bibliotecas Públicas, Parques Arqueológicos, Museos, Salas de Exposición y Casas de la Cultura. Contrario a lo que sucedió en otros países, debido a la pandemia del Covid-19, El Salvador fue ampliando la oferta de espectáculos en las zonas oriental y occidental del país, pero también la llevó a municipios y comunidades en los 14 departamentos. Por ejemplo, tras el fin de la cuarentena preventiva, entre octubre de 2020 y mayo de 2021, hubo más de 117 presentaciones artísticas en los Teatros Nacionales y otros espacios administrados por el Gobierno de El Salvador. Gracias al apoyo de los artistas, fue posible la reapertura gradual de espacios culturales, con aforos reducidos y estrictos protocolos de bioseguridad, diseñados junto al Ministerio de Turismo. Esto nos acreditó el sello internacional Safe Travels para continuar con nuestra cartelera cultural permanente.
¿De qué se trata el Plan Estratégico Institucional (PEI) 2019-2024 del Ministerio de Cultura?
A través del Plan Control Territorial, que incluye la recuperación de los espacios públicos en una asociación pública con el Ministerio de Obras Públicas y la Secretaría de Tejido Social, se ha ido fortaleciendo la construcción de Centros Urbanos de Bienestar y Oportunidades. Ahí, el Ministerio de Cultura aporta su experiencia en la organización y administración de bibliotecas y toda su formación en las artes. Las Casas de la Cultura, espacios olvidados por décadas, fueron retomadas tras la cuarentena a través del proyecto de “Fortalecimiento y modernización de Casas de la Cultura”, que permitió inicialmente la remodelación y equipamiento de las sedes de Zacatecoluca, Sonsonate, Ilobasco, Santo Domingo de Guzmán, San Miguel, Meanguera del Golfo y Suchitoto. Posteriormente, dotó de equipos tecnológicos al 100% de la red de 160 casas a nivel nacional. Al cabo de 2021, la intervención y remozamiento de las Casas de la Cultura garantizará el acceso al arte y la cultura en comunidades de los 14 departamentos del país, con una inversión sin precedentes que alcanza 1,2 millones de dólares.
¿Cuáles fueron las principales acciones del sector para mitigar los efectos del impacto de la pandemia en el área cultural?
Durante el confinamiento, el trabajo de las academias de Formación en Artes se mantuvo activo a través de clases y recursos virtuales, que permitieron la continuidad académica. Todo esto fue gracias al financiamiento del Fondo Especial de los Recursos Provenientes de la Privatización de ANTEL (FANTEL) para el Emprendimiento Artístico y Cultural. Se otorgaron 96.400 dólares para estimular las producciones de artistas independientes para 112 proyectos seleccionados. En la segunda convocatoria, se entregaron incentivos económicos que ascienden a 175,5 mil dólares, para ejecutar 97 proyectos. Además, como parte de las iniciativas de respuesta a la crisis sanitaria, más de 6.200 familias del sector artístico y cultural fueron beneficiadas con el bono de emergencia temprana, y cerca de 24.000 han recibido cestas y paquetes alimentarios.
¿Cuáles son las metas del Ministerio de Cultura en el corto, mediano y largo plazo?
La construcción de la nueva Biblioteca Nacional de El Salvador (BINAES) es un proyecto nacional de cooperación no reembolsable y fue posible gracias a la donación otorgada por la República Popular de China, la cual fue gestionada por el presidente Nayib Bukele. Su costo será de 54 millones de dólares, incluidos el equipamiento y los libros. Esta será una inversión sin precedentes que beneficiará a niños, jóvenes, maestros, investigadores, padres de familia y académicos al dotarlos de espacios dignos, de calidad y con los mejores recursos bibliográficos y tecnológicos. Es una oportunidad para El Salvador de contar con una Biblioteca Nacional de primer nivel, que exhibirá modernidad, tecnología y confort para los usuarios en general. Asimismo, a través de la Dirección Nacional de Patrimonio Cultural, el Ministerio de Cultura ejecuta la fase final de las obras de protección y mejoramiento delParque Arqueológico Joya de Cerén, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, en 1993. Todo esto con una inversión de1,38 millones de dólares. En una iniciativa de Nayib Bukele y la primera dama, Gabriela de Bukele, a favor de la niñez salvadoreña, el Gobierno invirtió 368.664 dólares en el proyecto Intervención Integral del Parque Infantil de Diversiones. Los fondos provinieron del convenio realizado con el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, y se enmarca en la fase II del Plan Control Territorial, que busca la prevención de la violencia, a través de la recuperación efectiva de los espacios públicos.